Estas galletitas craqueladas de limón son fáciles de hacer, sumamente tiernas y huelen de maravilla. Ideales para comer más de una y compartir con gente querida, o no.
Precalentar el horno a 180 ℃. Colocar papel manteca o una plancha de silicona en una placa para horno.
En un bol grande, con una espátula, mezclar la manteca con el azúcar, hasta lograr una consistencia liviana y aireosa. Agregar la esencia de vainilla, el huevo, la ralladura y el jugo de limón. Asegurarse de mezclar bien los bordes.
Incorporar los ingredientes secos hasta lograr una masa homogénea, sin integrar el azúcar impalpable.
En un plato, colocar el azúcar impalpable. Con una cuchara, formar bolitas (unos 4 cm de diámetro) y pasar por el azúcar hasta cubrir bien. Colocar en la placa, dejando unos 4 cm entre cada una.
Llevar a la heladera por unos 15-30 minutos.
Cocinar por 9-11 minutos hasta que la base se comience a dorar y la superficie, a “romper”. Sacar del horno y dejar reposar unos 3 minutos antes de levar a una rejilla.
Notas
COCCIÓN: Antes de cocinar, llevar a la heladera por unos 15-30 minutos para que mantengan la forma en el horno. Si te gustan más chatitas, llevalas al horno directamente. Otra cosa, si usas una placa de horno más oscura, las galletitas se cocinan más rápido. Así que sacalas del horno unos 2-3 minutos antes.
ALMACENAMIENTO: Conservar en un recipiente cerrado por 3-4 días a temperatura ambiente. También se pueden congelar tranquilamente.